Archivo mensual: May 2023

OBI-WAN KENOBI – PARTE III

Guion: Joby Harold, Hossein Amini, Stuart Beattie.
Dirección: Deborah Chow.
Valoración:

Sinopsis:
En su huida, Obi-Wan y Leia se encuentran con la resistencia. Pero Reva y ahora también Darth Vader les pisan los talones.

Resumen:
Leia y Obi-Wan llegan a un planeta minero donde Haja les aseguró que encontrarían ayuda. Pero el Imperio está por todas partes. Obi-Wan sigue viéndose desbordado, pero va estableciendo un vínculo con la chiquilla.

Se encuentran con la Rebelión, con una mujer que se hace pasar por oficial imperial y dirige una red clandestina de refugiados. Pero Reva y Vader llegan y hacen saltar sus planes por los aires. Leia es tomada por Reva, y Obi-Wan apenas logra salir con vida de su enfrentamiento con su viejo alumno.

Análisis:
La parte de Obi-Wan y Leia a la huida, cimentando su relación y su conflicto personal, es lo mejor del episodio y de la serie. Los diálogos están más cuidados que en otras partes, los actores sacan gran partido de la situación emocional de sus roles, y todo junto da pie a unas escenas con mucho sentimiento. Se remata con el suspense porque el Imperio les pisa los talones y se topan con un grupo de soldados. Hay buena tensión en algunos momentos…

Pero todo se viene abajo con ese puesto de control donde Obi-Wan pasa de capaz a torpe de un instante a otro y la ridícula escenita donde una pequeña barrera en un desierto parece algo insalvable, como si no pudiera rodearse. ¿Es que no les dio vergüenza ajena mientras lo rodaban?

Vuelve a levantarse el nivel con la entrada en juego de la rebelión, con Indira Varma muy sólida en un personaje bastante atractivo: una rebelde infiltrada como oficial imperial. El robot tiene poca presencia, pero como suele ser habitual en la saga, muestra una personalidad curiosa.

Pero las apariciones de los villanos siguen dejando muy malas sensaciones. Las riñas violentas siguen sin resultar verosímiles, en vez de hacerlos temibles parecen unos críos. La entrada de Vader promete elevar el tono de tensión y peligro, pero nada cuaja porque se mantiene el acabado mediocre y sin garra. Los escenarios resultan muy parcos, la dirección está muy perdida, las espantosas música e iluminación terminan de hundirlo todo, y de esta forma los encuentros y duelos en vez de épicos resultan de cine cutre. Ese Vader matando niños porque sí, en un torpe intento de que dé miedo, la huida de Obi-Wan de nuevo con una barrera (esta de fuego) que nadie es capaz de rodear… Qué penoso todo.

El secuestro de Leia deja todo en el aire de nuevo, pero no con buenas dosis de expectación: la premisa del rescate enfrentándose a mil peligros… la acabamos de ver hace un episodio.

<- Parte II Parte IV ->

OBI-WAN KENOBI – PARTE II

Guion: Joby Harold, Hossein Amini, Stuart Beattie.
Dirección: Deborah Chow.
Valoración:

Sinopsis:
Obi-Wan sigue el trasto de los captores, infiltrándose en los bajos fondos de Daiyu. Los Inquisidores llegan para darle caza.

Resumen:
Obi-Wan llega a Daiyu, donde la nave de los captores de Leia fue seguida por la gente de Bail Organa. Se infiltra en los bajos fondos hasta dar con la guarida de estos, y entra por la fuerza y la rescata. En la huída por las calles, los Inquisidores van tras ellos, y además con refuerzos, pues ponen recompensa a sus cabezas y todos los cazarrecompensas locales se ponen en marcha.

Obi-Wan debe confiar en el timador Haja Estree, que engaña a los pobres haciéndose pasar por Jedi. Y debe encontrar confianza en sí mismo y recuperar su conexión con la Fuerza, ganas por vivir, y coraje suficiente para enfrentar la situación.

La vida de Leia pendiendo de un hilo saca lo mejor de fatigado Jedi. Consigue librarse de duras penas de sus perseguidores y coger una nave. El Primer Inquisidor y Reva se echan las culpas el uno al otro, hasta que ella acaba con la vida de su superior.

Mejores frases:
-Eres un miserable, una rata que se aprovecha de los débiles. Pero sé por experiencia que las ratas conocen las cloacas mejor que nadie.

Análisis:
Este capítulo hace aguas por todas partes, y dudo que hubiera manera de salvarlo. Es el peor de la serie, y sin duda hizo que muchos no siguieran viéndola. Luego remonta, pero no tanto como para conseguir olvidar la cantidad de desatinos que aquí se acumulan.

Lo único rescatable es la conexión con El ataque de los clones. En la entrada en Daiyu se ve el intento de establecer una relación con ese episodio, donde conocíamos algo de los bajos fondos de Coruscant y nos adentrábamos también en la madurez de Obi-Wan tras perder a su mentor. La intriga detectivesca, sus dotes de supervivencia, su buen trato a los yonkis y pobres… Aquí volvemos a esos escenarios con un Jedi en una posición muy distinta: caído en desgracia, huidizo, fuera de la realidad… Pero el contraste dramático se limita a unas breves escenas simpáticas y ya está: Obi-Wan dando limosna a un clon veterano de la guerra, y su entrada a lo bruto en la guarida de los malos, al igual que hizo con Grievous.

El resto se centra en su relación con Leia y en la aventura de supervivencia. La dinámica entre los dos protagonistas prometía bastante pero aquí se ha quedado en su mínima expresión. Los conflictos y momentos de redención más predecibles que pudiéramos imaginar se enlazan sin alma ni una progresión dramática que levante un mínimo de pasión. Y por el otro lado, la persecución de los Inquisidores y los cazarrecompensas no llega a cobrar una forma determinada, es una amalgama de situaciones inverosímiles cuando no estúpidas que repiten cada premisa y diálogo del anterior episodio con la misma apatía: Reva es ambiciosa y el Primer Inquisidor un inútil que no sólo no lo aprovecha sino que le pone trabas.

Por qué Reva no está esperando a Obi-Wan en la guarida de los captores ni vigila los puertos espaciales, sino que se planta en los tejados dejándole margen de movimiento al Jedi. Qué sentido tiene refugiarse en un lugar plagado de mercenarios y cazarrecompensas que van a ir tras de ti. Y en qué cabeza cabe pensar que el timador Haja Estree, encarnado por el sobreactuado Kumail Nanjiani, podría resultar simpático en vez de un esperpento que lastra todas las escenas en que aparece.

La combinación de malos decorados, efectos especiales muy lejos del nivel esperable para la saga y visto en las otras series (cómo cantan las pantallas de fondo, y cómo oscuren todo para intentar disimularlo), una banda sonora grotesca y una puesta en escena espantosa, dan como resultado una serie de escenarios muy pobres, sin vida, sin lograr sentirse reales y amenazantes. Se ceba especialmente en la parte de acción, donde las carreras y tiroteos por tejados y callejones son lastimeros y dejan algunos instantes de inenarrable vergüenza ajena: Leia huyendo hacia el interior de un callejón sin salida y apareciendo en plena plaza, y el momento en que Obi-Wan recupera la Fuerza.

<- Parte I Parte III ->

HA FALLECIDO RAY STEVENSON, EL MÍTICO TITO PULLO

Ray Stevenson nació en Irlanda del Norte en 1964, aunque su familia no tardó en trasladarse a Inglaterra, donde estudió y acabó graduándose como actor con 29 años.

Stevenson llevava desde mediados de los noventa enlazando numerosos papeles secundaros en cine y televisión, con pocos de estos últimos recurrentes (Band of God -1995-, City Central -1998-). Su suerte cambió en 2004 cuando apareció en Rey Arturo y Caso cerrado, de las que saltó a la memorable Roma en 2005, donde con su entrañable interpretación de Tito Pullo logró que este se convirtiera en uno de los personajes más queridos de aquellos años.

Desde entonces tuvo roles secundarios más jugosos: El libro de Eli (2010), Punisher 2 (2008), Thor (2011, 2013), Los tres mosqueteros (2011)… Aunque da la impresión de que al no lograr papeles protagonistas se volvió a centrar más en televisión, donde se contó como actor estelar en varias series famosas, como en la séptima temporada de Dexter (2006), la sexta de Vikingos (2013), Black Sails (2014)… Su última aparición relevante está por llegar, en Ashoka (2023) de La guerra de las galaxias, y deja dos producciones italianas sin acabar.

Falleció a cuatro días de cumplir 59 años, mientras se encontraba en Italia para uno de esos rodajes. Solo se sabe que fue ingresado repentinamente y no tardó en morir. Cuando anuncien las causas actualizaré.

Biografía: Wikipedia. Filmografía: IMDb.

EL MANDALORIANO – 308 – EL RETORNO

The Return
Guion: Jon Favreau.
Dirección: Rick Famuyiwa.
Valoración:

Sinopsis:
Din Djarin y Bo-Katan se enfrentan a Moff Gideon.

Resumen:
Mando logra espacarse y se recorre la base aniquilando enemigos hasta dar con Moff Gideon. La lucha contra este y los pretorianos es cruenta, pero con ayuda de Grogu y Bo-Katan consiguen derrotarlo. Aunque en el proceso es destruido el sable oscuro, ya nadie duda del liderazgo de Kryze.

Por otro lado mandalorianos mantienen a raya a los soldados de la base, hasta que Axe Woves estrella el crucero para terminar de acabar con todo.

Los mandalorianos enciencen la gran forja para recuperar su hogar y sus costumbres. Mando quiere que Grogu se convierta en un huérfano y siga el proceso de convertirse en mandaloriano, y para ello debe adoptarlo primero.

Mando y Grogu toman posesión de una pequeña cabaña en Nevarro, pero también un trabajo como mercenario de la Nueva República en los márgenes de sus dominios.

Análisis:
Buen final de temporada, pero le falta alguna gran sorpresa. Es más como la conclusión de una etapa, centrado en cerrar o asentar las historias principales, y deja muy poco abierto.

Es más sólido que el episodio anterior o que el desastre del final de la segunda temporada, que era un coladero de agujeros y sandeces. Va al grano con contundencia y sin patinazos destacables. Pero precisamente por eso también es bastante predecible. No hay giros inesperados en las confrontaciones, que siguen una línea muy a lo El Imperio contraataca pero sin conseguir su atmósfera tensa y tenebrosa. Pero lo que hay es suficiente para garantizar un espectáculo muy grato.

La batalla de los mandalorianos es más variada y movidita. La lucha en el espacio es breve pero deja un final épico. La pelea en el aire es más emocionante que las parcas carreras por pasillos del anterior. El duelo final con Gideon y sus pretorianos está muy trabajado, ofreciendo un sinfín de escenarios, filigranas, golpes… Sólo se ve ligeramente lastrado porque en los movimientos más rápidos del muñeco de Grogu no han logrado todavía la fluidez y verosimilitud necesarias para no sacarte de la escena en ocasiones.

La banda sonora de Joseph Shirley ha sido la mar de efectiva durante todo el año, pero no ha resultado tan imaginativa y solvente como la de Ludwig Göransson. Y en este episodio final se abusa de su presencia: hay tramos donde hubiera ido mejor sin música, como la pelea final con Gideon, pues la situación de suspense habla por sí sola, y en cambio nos meten un tema de acción machacón un tanto contraproducente.

Para encontrar aspectos cuestionables hay que ir al detalle. Ahora Mando vuelve a ser un luchador implacable que derrota con facilidad a cuantos se encuentra. Gideon tiene un mapa donde ve los movimientos de Mando… y no es capaz de dar con él antes de que destroce todo, y mira que el tío va sin prisas. El combate entre escudos de energía es un poco forzado, sobre todo porque R5 reaparece sin explicarse de dónde sale, y vuelve a ser chocante que este es un universo donde no se hayan inventado las barandillas, menuda cantidad de accidentes laborales habrá. Otra vez que dejan la flota de lado, en vez de usarla para bombardear la base y combatir contra los soldados voladores. La tontería de los cascos sigue siendo un lastre, tanto porque no hay quien distinga a los personajes como por la chorrada de que estén presurizados y permitan volar por el espacio a pesar de que es obvio que la armadura no los cubre por completo. Pero al final les ha venido bien, porque resulta que Pedro Pascal no rodó esta temporada, pues estaba liado con The Last of Us , así que tras el traje hay un extra, y sólo puso la voz en un par de días de trabajo de doblaje.

Como final de temporada y de etapa, da para algunas reflexiones. La primera es que vuelvo a flipar con los seguidores, quienes claman al cielo porque este año no les ha gustado, a pesar de mostrar por fin la esperada maduración. Según dicen muchos, es una temporada malograda porque «abre historias nuevas» que no son lo que esperan de la serie, e incluso que ahora están usándola para intentar arreglar los errores que cometió Disney con el fallido cierre de la trilogía de secuelas (El ascenso de Skywalker), como el resurgir del imperio, el tema clon y Snoke, etc., y que quieren que vuelva a la repetitiva y pobre línea de aventuras al estilo El equipo A (Stephen J. Cannell, Frank Lupo, 1983).

Y digo yo, donde estaba esta gente cuando el doctor Pershing es presentado en… ¡los tres primeros capítulos!, Gideon aparece al final de la primera temporada, las costumbres mandalorianas fueran primordiales en el desarrollo de la vida de Mando, se fueron desarrollando poco a poco y Bo-Katan y la historia de reunirse y recuperar Mandalore se asienta del todo en el segundo año, en capítulos que entonces eran bien valorados…

Pero sí es cierto que de tanto centrarse en Bo-Katan deja a Mando un poco como secundario. Su arco de la relación con Grogu llegó a término, y lo que venga será una nueva etapa en su historia. Una que deberá abordar algo que se ha ido dejando demasiado de lado: el crecimiento de Grogu y sus poderes. La serie siempre ha ido con cuentagotas en este aspecto, relegando demasiado a baby Yoda a escenas cómicas de relleno, pero una vez presentado el tema de la fuerza con Luke y Ashoka deberían haberse centrado, y en cambio ha quedado muy aparcado.

Así que en próximas etapas supongo que se adentrarán en Grogu, los Jedis que quedan, con la serie de Ashoka en cabeza, el resurgimiento del Imperio… Todo son temas más apasionantes que volver a la premisa de Mando teniendo aventuras sueltas sin calado ni originalidad. Si por el camino se caen esos fanáticos que no quieren que la saga progrese y crezca, mejor todavía.

<- 307| Los espías El mandaloriano ->

EL MANDALORIANO – 307 – LOS ESPÍAS

The Spies
Guion: Jon Favreau, Dave Filoni.
Dirección: Rick Famuyiwa.
Valoración:

Sinopsis:
Bo-Katan lidera la flota para recuperar Mandalore y encender la forja. En el reconocimiento de la superficie del planeta se topan con unos supervivientes mandalorianos, que podrían ser aliados o enemigos en el inminente enfrentamiento con Moff Gideon y el renacimiento del Imperio.

Resumen:
Bajo el mando de Bo-Katan Kryze, las distintas facciones de Mandalorianos se disponen a recuperar su planeta natal, tomado por la naturaleza hostil. Allí se encuentran con que sigue habiendo algunos de su pueblo habitándolo. Este grupo sobrevive a duras penas, navegando por la árida superficie y escondiéndose bajo tierra. La nueva alianza es tan débil como las anteriores pero da sus frutos, pues conocen la zona.

Al alcanzar la mítica fragua de Mandalore, resulta que Moff Gideon ha llegado antes y tiene una base fuertemente armada. Este ha suplicado al Imperio en la sombra que le dé refuerzos para enfrentar la amenaza mandaloriana.

La batalla es cruenta, pues Gideon ha armado a sus tropas con armaduras de beskar. Hay bajas en cantidad, y Mando es tomado prisionero mientras Bo-Katan se bate en retirada.

Notas:
-Brendol Hux es el padre del General Hux de la trilogía de secuelas. Y el actor Brian Gleeson es el hermano de Domhnall Gleeson.

Análisis:
El arco final de temporada se presenta bastante atractivo, promete dar un cierre o al menos punto y aparte a varios frentes abiertos, y se anuncia épica en grandes cantidades. Pero aunque los fuegos artificiales pueden disimularlo durante un rato, no tarda en hacerse evidente que esta primera parte del clímax se apoya es unas bases muy usadas a lo largo de la serie, y resulta un tanto repetitivo y predecible. Además, se hace de nuevo evidente que falta de un analista de guiones (script doctor) en la sala de escritores que pula las muchas lagunas cuando no flagrantes cagadas que van dejando Jon Favreau y Dave Filoni.

Tenemos otra vez los mismos conflictos entre distintos grupos de mandalorianos y el mismo enfrentamiento con Gideon que hemos visto ya varias veces. El anuncio de que nos acercamos al desenlace de ambas tramas levanta el interés, sobre todo con la sombría escena de los tejemanejes del Imperio y el no sorprendente pero efectivo encuentro con otro grupo de mandalorianos. Pero la expectación inicial se va diluyendo conforme la falta de novedades rebaja el entusiasmo y las situaciones endebles se van acumulando, y llega un punto en que la propia credibilidad del relato se resiente y hecha un poco por tierra las partes que deberían ser más espectaculares y trágicas.

Llevan toda una flotilla para investigar el planeta y enfrentar los peligros… y la aparcan y se ponen a andar, acompañando el paseo de unos diálogos sobre explicativos sonrojantes. Tenemos otro bicho gigante metido más que nunca con calzador: no aporta nada a la historia, no era necesaria más acción, y da bastante pena ver a los supuestamente experimentados supervivientes quedándose pasmados mientras la criatura se alza, sin virar la nave al instante o tomar posiciones de defensa.

La batalla está bien intencionada, pero podía estar mejor planificada y mejor rodada. Ya la propia concepción es confusa. Esa pedazo de base no se ha podido construir en tres días como se da a entender por la reacción de Gideon a la reunificación de los mandalorianos, pero a la vez, es poco creíble que los habitantes de Mandalore no se hayan percatado de su presencia si lleva tiempo ahí. La trampa contra los protagonistas es rematadamente obvia y los autores se esfuerzan por ofrecer un escenario mínimamente elaborado que pueda disimularlo un poco o que no los deje como idiotas. Las peleas por el aire y los pasillos son facilonas, les falta tensión y emoción, y tiene graves carencias: casi nadie se esfuerza por buscar cobertura, supongo que a sabiendas de que las armaduras mágicas que apenas cubren a los mandalorianos los hacen invencibles pero las completas de los imperiales son inútiles. Al menos los pretorianos acojonan, no son unos parias como en todas las películas de la saga, incluidas las originales.

Y para terminar, el giro con Mando secuestrado es exactamente el mismo que el final con Grogu en la segunda temporada con todo descaro, además de que a pesar de que se ha mostrado siempre como un contrincante formidable, con mil armas en el traje, cae con demasiada rapidez y facilidad. Por su lado, Grogu tiene las escenas graciosas de rigor, ahora manejando el robot IG-12, pero no aporta absolutamente nada, como ocurre más veces de la cuenta.

De esta forma, el episodio es a la vez emocionante y frustrante, como viene siendo habitual. En esas condiciones no puede considerarse de los mejores de la serie como claman muchos fanáticos, y desde luego el anterior es bastante superior.

<- 306| Soldados a sueldo 308| El retorno ->

OBI-WAN KENOBI – PARTE I

Guion: Joby Harold, Hossein Amini, Stuart Beattie.
Dirección: Deborah Chow.
Valoración:

Sinopsis:
Obi-Wan vive escondido en Tatooine, vigilando a Luke. Pero una orden que caza Jedis amenaza su tranquilidad, sobre todo cuando secuestran a Leia en Alderaan.

Resumen:
La melancólica paz de Obi-Wan, recluído en Tatooine, vigilando a Luke como última gesta noble de los fallidos y derrotados Jedi, se ve perturbada por la llegada de la orden de los Inquisidores, que persiguen Jedis y sospechan de la cercanía de Kenobi y de otro menos conocido. La lidera el Inquisidor Supremo, que se las ve con la ambiciosa tercera hermana Reva, quien se excede en sus órdenes para sus propios intereses.

El tío Owen,el joven Luke y ese jedi que anda a la fuga están en peligro, pero Obi-Wan prefiere agachar la cabeza esperando que la tormenta pase de largo. Sin embargo, Reva está obsesionada con dar caza al famoso Kenobi, y sabiendo que estuvo asociado a Bail Organa secuestra a su hija Leia para hacerlo salir de su escondite.

Mejores frases:
-¿Quieres mi ayuda? Coge esto, márchate y entiérralo en medio del desierto. Escóndete. Vive una vida normal.
-Jedi: ¿Y la gente que nos necesita? ¿Qué hay de la lucha?
-La lucha se acabó. Perdimos.
-¿Qué le ha ocurrido? Antes era un gran Jedi.
-El tiempo de los Jedi ya ha pasado.

Análisis:
De primeras, unos vistosos planos de Alderaan y Tatooine nos hacen creer que estamos ante una superproducción con la ambición y calidad de las películas, como ya han demostrado en El mandaloriano o la inmediatamente posterior Andor. Pero pronto empieza a deslucir todo. La sensación de prisas y desgana va dejando un acabado sin garra, por momentos torpe, y va engullendo un guion que empieza en unos mínimos muy justos que necesitaban mostrarse con más nervio.

Las entradas en acción de Obi-Wan y Leia no guardan sorpresas, pero como indiqué en el análisis global de la temporada, poco margen había para lograrlo y debían centrarse en apuntalar bien estos pilares. Se nota que los autores intentan mostrar con esmero cada situación personal y el factor nostalgia, nostalgia tanto por reencontrarnos con una historia y personajes muy queridos como por otros tiempos mejores, pues la melancolía y pesadumbre embargan la vida de Kenobi como Jedi que fracasó y se refugia en una última y noble misión, y también agobia a los Organa, en su vida de falsas apariencias mientras el mundo alrededor se resquebraja.

Pero pronto guion y acabado van mostrando una apatía creciente y errores de ejecución que rompen la conexión, y lo que podría ser un relato clásico y sencillo pero emocionante se va convirtiendo en una agonía y un disparate.

La presentación de la orden que caza Jedis se queda en un cliché tras otro de villanos de baratillo, y Reva y el Inquisidor supremo dan más risa que miedo. El jedi a la huida no podría importarme menos, de hecho, llegan a provocar vergüenza ajena sus lamentos. Las escenas de corre que te pillo de Leia y las de los currantes que fingen cortar la carne del monstruo del desierto pero no cortan nada son de una cutrez alucinante. Organa aparece en Tatooine y nadie lo ha seguido. ¿Para qué han secuestrado a Leia sino para encontrar a su amigo Obi-Wan? Vaya forma de desaprovechar una gran oportunidad, y vaya riesgo poner todos los huevos en la misma cesta esperando que acepte el reto de ir a rescatarla. Y por el otro lado, ni Obi-Wan ni Bail se cuestionan tampoco por qué la han tomado rehén.

Solo la conexión con el afligido Obi-Wan y la simpática Leia, ensalzados por los magníficos actores, logra mantener el interés en seguir viendo qué ocurrirá. Destaca lo bien que se hila el contraste entre estos dos, con su respeto por «las formas de vida inferiores» (robots, jawas, pobres), y los demás habitantes de la galaxia, egoístas y desconectados de la realidad. Y también el propio contraste entre ellos: Leia ansía vivir y aprender, Kenobi agachar la cabeza y desaparecer.

<- Obi-Wan Kenobi Parte II ->