HANNIBAL – TEMPORADA 2

Hannibal
NBC | 2014
Productores ejecutivos: Bryan Fuller, varios.
Intérpretes: Huhg Dancy, Mads Mikkelsen, Caroline Dhavernas, Lawrence Fishburne, Hettiene Park, Gillian Anderson, Michael Pitt, Raúl Esparza.
Valoración:

Un final de infarto en la impresionante primera temporada nos dejó con Will encerrado en el hospital para criminales dementes en espera de juicio, porque hacia él apuntan las pruebas de los asesinatos que siguieron a los del Destripador de Chesapeake. Su situación no podría ser más precaria. Su mente está convulsa, no es capaz de poner orden en sus ideas. Sus amigos se aferran a las pruebas, algunos creyendo sin dudas que es culpable, como Alana, otros queriendo negar la evidencia y esperando un milagro, como Jack. Will está solo en su intento de señalar a Hannibal como el asesino más peligroso que han conocido.

El panorama es tan inquietante y perturbador y a la vez sugestivo y absorbente como en ese excelente primer año. Los guiones exponen con verosimilitud una trama algo fantasiosa sin pecar de sensacionalismos o inclinarse hacia giros facilones. El thriller no podría ser más ejemplar, capítulo a capítulo mantiene la intriga de forma que te muerdes las uñas, ofrece casos rebuscados y asombrosos, exprime a los personajes pero sin dejarlos secos y no se olvida de incluir estupendas sorpresas de vez en cuando. La construcción de la atmósfera es exquisita en lo sutil, con el ambiente enrarecido y la inquietud por el peligro latente, y espectacular en lo tangible, siendo asquerosa hasta resultar la serie más gore y repulsiva que he visto, con lo que es alucinante que siga en antena emitiéndose en una cadena generalista. Sangrienta y visceral en los asesinatos, morbosa en las idas de olla de Hannibal como las comidas que hace con sus víctimas o la brutal mutilación facial de Mason Verger, estremecedora en el ambiente turbio y malsano… Es imposible apartar la mirada ante imágenes que deberían ser grotescas y resultan cautivadoras, ante personajes oscuros y torturados que resultan fascinantes. Con las brillantes labores de dirección, fotografía, atrezo (las escenas del crimen y los cadáveres) y música Hannibal convierte la maldad en puro arte.

El reparto está a la altura de unos personajes muy exigentes. Mads Mikkelsen clava todo lo que se puede esperar de Hannibal: la fachada y las sutilezas cuando finge y manipula, el lado temible cuando da rienda suelta a su lado psicópata. Hugh Dancy expone con maestría el sufrimiento, la inestabilidad y el miedo a perder la poca cordura que le queda: es un manojo de emociones y tormento. Jack Crawford ha ganado protagonismo y Lawrence Fishburne está a la altura en el mejor papel que le recuerdo: con una interpretación muy contenida muestra la pesadumbre por tener a su amigo en las últimas, la inquietud porque podría salir todo mal, el dolor porque su esposa se muere. El resto quedan en un plano más secundario, pero están todos muy esforzados en sus papeles, destacando a la sugerente Gillian Anderson (Du Maurier) y la firme Caroline Dhavernas (Alana), consiguiendo esta última hacer más interesante a un personaje algo desaprovechado.

Alerta de spoilers: spoilers gordos a partir de aquí.–

En esta situación vemos que Hannibal sigue jugando con todos y su idea no es otra que exprimir a Will por curiosidad. Descubrimos que no es el único paciente al que ha dirigido para cometer asesinatos, pero este es especial. Mediante la mano de Hannibal pronto el juicio empieza a nublarse por otros crímenes que alejan la sospecha de Will. Éste está a punto de derrumbarse, y libre y cambiado de bando sería un gran aliado. Se puede hablar de que hay un ligero bajón de ritmo en el ecuador de la temporada, pues con Will liberado tenemos un par de casos que de primeras parecen de relleno, pero pronto se ve como un cambio de ritmo inevitable dada la trama que se está desarrollando, y la intriga de si será Will capaz de vencer la sugestión de este temible psicópata mantiene el nivel muy alto. Pronto el plan de contraataque de Will (ocultado al espectador sabiamente y sin dejar sensación de trampa) y el esperado enfrentamiento con Hannibal saltan a primer plano, y ahí todo lo expuesto y construido con tranquilidad y buena letra en ese ínterin explota de forma espectacular, antológica, memorable: el último episodio es para enmarcar y contar entre los mejores de la historia, una auténtica obra maestra. Y menuda masacre. Ahora queda por ver si no resucitan a más personajes de la cuenta. Por mí los dejaba a todos muertos e iniciaba una nueva etapa con Hannibal a la fuga, pero es probable que Jack o Will o ambos se salven e inicien su búsqueda.

Ver también:
Temporada 1.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.