Archivo mensual: julio 2023

OBI-WAN KENOBI – PARTE IV

Guion: Joby Harold, Hannah Friedman.
Dirección: Deborah Chow.
Valoración:

Sinopsis:
Obi Wan se lanza al rescate de Leia en la base de los Inquisidores con ayuda de la rebelión.

Resumen:
Con ayuuda de Tala y otros miembros de la rebelión, Obi-Wan se infiltra en la base del Imperio donde Reva la Inquisidora retiene a Leia. Consiguen sacarla tras sortear la seguridad y los soldados.

Las disensiones entre los Inquisidores siguen latentes, y Vader se cansa, pero Reva ha colocado un dispositivo de rastreo en el robot juguete de Leia para poder localizarlos.

Análisis:
Tenemos un escenario clásico de La guerra de las galaxias, la incursión y rescate en una base enemiga. Pero este guion que pretende imitar el factor asombro de Una nueva esperanza y el tono tenebroso de El Imperio contraataca vuelve fallar notablemente. Pasa por todas las fases de esta premisa con prisas, sin terminar de asentar la verosimilitud ni la atmósfera de suspense. Hay mejoras detrás de las cámaras, con una fotografía y dirección que sacan buen provecho de los decorados, pero ante las carencias del libreto no hay remontada posible, y muchas escenas resultan chocantes o incluso irrisorias.

La falta de interés que despiertan los personajes de la rebelión impide conectar con esa sección, le resta trascendencia. Y eso que había empezado bien con la entrada en acción de Tala en el anterior capítulo. Pero esta vez está metida en el juego con calzador: su presencia en la base no parece necesaria, Obi-Wan con sus poderes se bastaba, y menos si implica que ella se pasee delante del todo el mundo pensando que pegando cuatro voces conseguirá sortear cualquier puesto de seguridad.

Pero al final la aventura de Obi-Wan tampoco ofrece nada destacable. Se infiltra en territorio enemigo sin dificultad alguna, los drones y soldados de vigilancia son idiotas perdidos. El suspense por si es descubierto o qué nuevos inesperados retos enfrentará se diluye rápidamente. Igual ocurre con la sensación de peligro sobre Leia: no puede establecerse si parece que estamos ante una niña a la que unos padres intentan castigar pero se lo toma a cachondeo.

Esos cazas rebeldes volando en plan suicida hacia el interior del hangar, sin encontrarse con ninguna defensa aérea pero poniéndose a tiro de los soldados, para en el siguiente plano estar fuera otra vez, y la fuga de Obi-Wan con la niña escondida en el abrigo sin que nadie lo note, dan muchísima vergüenza ajena y llevan a terminar un episodio bastante básico e insípido con un buen bajón.

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BLACK MIRROR – TEMPORADA 6

Netflix | 2023
Drama, ciencia-ficción, suspense | 5 ep. de 43-79 min.
Productores ejecutivos: Charlie Brooker, Annabel Jones.
Intérpretes: Annie Murphy, Salma Hayek, Avi Nash, Samuel Blenkin, Myha’la Herrold, Daniel Portman, John Hannah, Monica Dolan, Aaron Paul, Josh Hartnett, Kate Mara, Zazie Beetz, Danny Ramirez, Robbie Tann, James P. Rees, Anjana Vasan, Paapa Essiedu.
Valoración:

Alerta de spoilers: Sin datos reveladores de ningún tipo. —

Black Mirror ha sido una serie extremadamente irregular desde el principio, capaz de deslumbrar con ideas rompedoras en episodios redondos y patinar con premisas también punteras que acaban ahogadas en ejecuciones torpes y cargantes. Pero la media de la última temporada bajó bastante, por lo que parecía que a Charlie Brooker se le va agotando la inspiración.

La sexta etapa comienza recuperando la esencia con dos capítulos de los que dejan huella y uno extraño pero bastante correcto. Sin embargo, este es el primero del inexplicable giro estilístico que ha dado Brooker, y los dos que cierran el año se sumergen por completo en esa nueva línea con historias chocantes y fallidas.

Su visión de lo que nos aguarda el futuro inmediato en relación con las nuevas tecnologías ha venido ofreciendo una perspectiva original, rebuscada y oscura, pero también se sentía muy verosímil y cercana, por lo que entra de lleno en una crítica social presciente y espeluznante. Podría pasar mañana mismo. Podría pasarte a ti.

En este inesperado cambio ha empezado a discurrir por un tono de suspense y terror con toques de humor al estilo Buffy, la cazavampriros (Joss Whedon, 1997) y Expediente X (Chris Carter, 1993), pero carente de sutilezas y cortoplacista, y con guiones a medio cocer. Si a Charlie Brooker se le acaba la inspiración y quiere pivotar, que no agote Black Mirror y se monte otra serie, pues seguro que con su caché Netflix le da barra libre.

Lo de contar con grandes estrellas en la dirección y en la música parece que se quedó en la cuarta temporada. No sé si es por dinero o porque no andar cuadrando agendas de gente ocupada ahorra complicaciones. Pero no se echan en falta, pues autores con talento hay muchos, y también se puede pensar que el tener nombres desconocidos evita distracciones y expectativas. Además, como siempre la renovación de autores garantiza frescura… Quizá debería contar también con escritores que aporten nuevas historias.

Por otro lado, sigue explorando cierta continuidad, pues Brooker introduce cada vez más detalles que enlazan los capítulos en un microuniverso propio donde puedes entretenerte pillando mil referencias. Claro que si va a dedicar más tiempo a esto que a pulir los guiones, pues no va a ser una aportación lustrosa. Y tiempo ha tenido de sobras, pues cuatro años han pasado desde la anterior temporada.

Tras el salto encontraréis el análisis por capítulos.
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